Ay,
madre mía, cuánto tiempo sin actualizar el blog, ¡más de un mes! Llevo unas semanas
con una entrada pendiente para hablar de una experiencia estupenda que viví el
mes pasado.
Los
días 24 y 25 del mes de mayo se celebró en el Hotel Holliday Inn-Madrid
Alcalá el Congreso “Por la excelencia en
la educación de 0 a 3 años” organizado por la Asociación Mundial de Educadores Infantiles AMEI-WAECE. Este
congreso internacional estuvo dirigido a los profesionales del primer ciclo de la educación infantil (de 0 a
3 años). Fueron más de 500 los educadores asistentes al Congreso y unos 200 lo
siguieron a través de internet desde diferentes partes del mundo.
Los expertos invitados debatieron
sobre la educación de los niños de 0 a 3 años, partiendo de la base de que la
educación empieza con el nacimiento y de que los primeros años de la vida del
niño ponen los cimientos para un crecimiento saludable y armonioso.
Yo tuve la suerte de que me
invitaran para hablar de los Bebecuentos. Titulé a la ponencia “Bebecuentos:
técnicas y recursos para acercar los bebés a los libros”, y en ella hice referencia a varias
cuestiones: la importancia de la narración de historias desde la cuna, la
selección de material (para narrar y para manipular por parte de los bebés), lo
esencial de contar cuentos por placer, la necesidad de que se generen
relaciones muy estrechas entre la familia y la escuela para potenciar los
afectos en torno a los cuentos, las nanas, los poemas y el juego, etc.
La conferencia duraba una hora y
media pero finalmente hubo que reducirla por cuestiones de horarios, y entre
eso y que me extendí más de lo debido me quedó media ponencia pendiente. Estoy
en proceso de crear un apartado en el blog específico para los Bebecuentos,
debido a la gran cantidad de docentes interesadas en este tema, así que en
cuanto pueda me pongo a ello.
También tengo pendiente un
artículo sobre este tipo de sesiones, que espero que vea la luz muy pronto, y
para el que algunos narradores de España expertos en Bebecuentos han
colaborado.
Muchísimas gracias a la
asociación AMEI-WAECE por confiar en mí y al regalo de todas las asistentes
satisfechas y curiosas.