Hace unos días descubrí en una librería a la que no suelo ir, Islátika, en Santa Cruz, este librito publicado en 2019 por la editorial Océano Travesía, una de las editoriales en que más confío en lo que respecta a edición de libros para primera infancia.

De cabeza está editado en cartoné, cuenta con 18 páginas en cartón satinado y está escrito e ilustrado por Stéphane Kiehl, ilustrador francés.

El libro ha sido editado junto a otro titulado “Diez sorpresa”. En ambos, los protagonistas son los mismos, esta serie de animales de diferentes colores que observamos en la cubierta. En “Diez sorpresa” los van presentando a todos mientras se va contando del 1 al 10, pero la traducción que leí me pareció tan horripilante intentando rimar, que no pude terminar el libro.

Sin embargo, “De cabeza” me ha parecido estupendo para compartir con los/as más pequeños de la casa, para leer en familia. Me imaginé fácilmente a la mamá a la que se lo iba a regalar con su niña de 2 años en el regazo (y cuando tuviera 3, 4, 5…).

En este libro el protagonista es el murciélago, que tanto llama la atención en Educación Infantil, durmiendo boca abajo. Los demás animales se van acercando, curiosos, para observarle o para intentar comérselo, pero siempre desde diferentes perspectivas en la forma en la que la ilustración y la letra se disponen. En ocasiones el libro se lee “al derecho o al revés, según se entienda”, desde el punto de vista del murciélago y en otras desde donde le están mirando los animales, de manera que, como personas adultas que estamos leyendo el libro en voz alta, debemos ir moviendo el libro y girándolo para poder leer. Así se comparte con el niño o la niña el movimiento del libro y los diferentes puntos de vista jugando con el formato.

De hecho, como pueden ver más arriba, ya en la contracubierta nos dan la pista de que vamos a tener que girar el libro para poder leer.

Me ha parecido muy interesante como lectura compartida, y puede acercarles al conocimiento de este animalito o guiarles hacia el sueño a la hora de ir a dormir.

¡A disfrutar de la lectura, familias!