Hoy en la biblioteca infantil Central de Edimburgo me he encontrado, en la sección de libros para bebés, estos dos títulos de Daisy Hirst editados por Walker Books. Sobresalían entre los demás como dos soles. Les cuento por qué:

Son dos libros de cartoné cuyos protagonistas son diferentes monstruos. Uno habla de la ropa y otro de la comida. El de la comida está escrito en verso y el de la ropa no. Ambos son igual de simpáticos. Juegan con el humor a través del clásico giro final. Consisten en la enumeración de elementos supuestamente correctos en contraste con los “incorrectos”, algo que los niños y niñas pequeños entenderán fácilmente y que les resultará muy divertido.

Por ejemplo, en el libro de la comida, se nos muestra a varios monstruos comiendo una pera, cereales o una tarta y, de pronto, encontramos a un monstruo comiendo un rastrillo o un tractor.

Las ilustraciones me han parecido acertadísimas, encantadoras. Resaltan las pequeñas bestias sobre fondos limpios de forma simple pero reconocible. Nuestros peques podrán nombrar objetos cotidianos, señalar partes del cuerpo de los monstruos y divertirse con los objetos que aparecen. Se sentirán fácilmente identificados con esos pequeños seres de ojos vivos, dientes separados y vientres redondeados.

Además, me ha parecido que a nivel de género y diversidad racial están muy bien pensados: los nombres de los monstruos o monstruas y la ropa que llevan pueden adaptarse perfectamente a ambos géneros y, en el libro de las comidas, el único humano que aparece tiene piel morena y pelo negro.

¡Me ha gustado absolutamente todo de estos títulos! Creo que para niños y niñas a partir de 2 años es estupendo. ¡A disfrutar!