Pocas cosas hay en la vida y en este trabajo más importantes que las personas.
Las personas con las que se cuenta, las personas a las que se cuenta, las personas que te tienen en cuenta y a las que quieres encontrar ahora y siempre.

De mi paso por La senda del cuento me llevo una ciudad de piedra que no es de piedra. Me llevo las calles retorcidas, el trajín de los viajeros en las plazas. Los puentes y el río. La noche y el frío. El silencio.

Maco, Amadeo, Toledo de noche y el frío.

Me llevo a todas y cada una de las personas a las que he conocido de Matadero Lab Toledo:
El brillo de Maco, la voz y el arte de Amadeo, la simpatía de Fernando, la familiaridad de Chon, la gosssadera de Javier…
Su tiempo, sus cuidados, su acompañamiento, sus coches de acá para allá.
Me llevo los ratos en el Recaredo y el Jacarandá.

Y, claro, me llevo las personas a quienes conté en 8 maravillosas sesiones que realmente lo fueron.
La primera con una veintena de adolescentes de ojos vivos.
La segunda con más de 60 familias que desde el segundo uno ya estaban a cien de energía y participación.
La tercera a más de 30 mujeres y un hombre que quiso otro cuento chiquito.

Imagen: Amadeo Aranda

La cuarta, a más de 50 familias que se quedaron con ganas de más.
La quinta, a más de 25 mujeres que rieron y una que lloró.

Imagen: Maco Díaz

La sexta, a unas 20 tranquilas familias de un pueblo donde aún no se habían contado cuentos.
La séptima, a unas 12 familias de ojos atentos.
La última, a unas 10 personas adultas en una sesión íntima y dialogada.

Imagen: Maco Díaz

Las enumero para no olvidarlas, para mantenerlas en este diario público de trabajo y poder volver a ellas.

Pocas veces me he marchado de un lugar despidiéndome de una familia de la que me he sentido parte. Un aire de cercanía y calidez me lleva volando de vuelta a casa.

Me llevo a Toledo impreso en aluminio y corazón. (Gracias, Amadeo). Y me llevo mazapanes de Santo Tomé, claro.

Gracias de corazón, gentes de La Senda. Con ustedes haciendo el camino, yo ando lo que haga falta.